3 actitudes erradas ante el pecado
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La mejor manera de perseverar en tus logros es ayudando a otros a hacerlo.
Estás a punto de comenzar a trabajar en el último propósito del año. Confío en que Dios ha hecho muchas cosas en tu vida este tiempo. ¿Llegaste a esta publicación por casualidad? No importa, prepárate para que el siguiente año pongas manos a la obra en llevar a cabo cada uno de los propósitos de esta extraordinaria iniciativa: #12Meses12Propósitos.
Esta imagen refleja lo mucho que has logrado estos últimos 11 meses y es justamente lo que, como último propósito de este año, y de los años por venir, podrías ayudar a otros a alcanzar. De eso se trata la iglesia, de ser y hacer discípulos, por lo que te animo a apoyarte en estos 12 propósitos para hacerlo posible.
Quizá uno de los mejores propósitos que podemos fijarnos es, en adelante, ser ahora quienes discipulemos a alguien que comienza su recorrido en la fe o que requiere restauración. A esa persona podemos retarla a comprometerse a llevar a cabo estos propósitos y a imitar nuestra fe, pues el mismo Dios que ha obrado en mí puede hacer grandes cosas en otros.
Sean nuevos creyentes o creyentes de tiempo atrás que se habían alejado del camino, en ambos casos requieren comenzar de cero. La realidad es que, difícilmente, hay en las iglesias alguien dispuesto a dedicarles tiempo y acompañarlos en el proceso, pero tú puedes ser usado para este propósito.
Sé un instrumento en las manos de Dios para que ellos sean bendecidos. ¡Para eso es la iglesia! Sin embargo, no solo necesitan a alguien que los acompañe, oriente y guíe, sino también a alguien que les ponga el ejemplo de cómo hacerlo. ¿Lo harías?
Es muy fácil enseñar a alguien lo que debe hacer, mas el verdadero reto es demostrarles cómo. Eso es ser cristiano. Eso es la iglesia. Si le dices a alguien que puede ser libre de su pecado es porque Dios ha desplegado su poder en tu vida y ahora eres libre de la esclavitud a los pecados que practicabas.
Enseñar que Dios es amor, que es misericordioso, bueno y perdonador cualquier lo hace mientras no tenga que amar a quien le hace mal, ser misericordioso con el que sufre, bueno con el malo y perdonador con el ofensor. El discípulo de Jesús vive estas cosas y da ejemplo de lo que cree.
Si le dices a alguien lo que Dios hace en las personas pero ellas no lo ven en ti, no lo creerán, y si lo creen, difícilmente lo vivirán. Debemos ser ejemplo, testimonios vivos.
La mejor manera de mantenerte practicando estos 12 propósitos de restauración que te ayudarán a perseverar en la fe en Cristo es animando a otros a hacerlos. No ensañarías algo que no practicas, ¿no crees?
Así es como nos necesitamos unos a otros en la iglesia para animarnos a perseverar y así mantenernos firmes en lo que creemos. Al enseñar a otro a creer y permanecer firme en ello tú te comprometes con esa persona a creer y mantenerte firme en ello. Es un beneficio mutuo. Así esa persona dará el mismo buen ejemplo a otros.
La actitud correcta la vemos en este texto de Filipenses, pues no perseveramos para ganar la salvación, sino que perseveramos porque la obtendremos:
7 Pero las cosas que para mí eran ganancia las he considerado pérdida a causa de Cristo. 8 Y aún más: Considero como pérdida todas las cosas, en comparación con lo incomparable que es conocer a Cristo Jesús mi Señor. Por su causa lo he perdido todo y lo tengo por basura a fin de ganar a Cristo 9 y ser hallado en él; sin pretender una justicia mía, derivada de la ley, sino la que es por la fe en Cristo; la justicia que proviene de Dios por la fe. 10 Anhelo conocerlo a él y el poder de su resurrección, y participar en sus padecimientos, para ser semejante a él en su muerte; 11 y de alguna manera, me encontraré en la resurrección de los muertos. 12 No quiero decir que ya lo haya alcanzado ni que haya llegado a la perfección, sino que prosigo a ver si alcanzo aquello para lo cual también fui alcanzado por Cristo Jesús. 13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado. Pero una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y extendiéndome a lo que está por delante, 14 prosigo a la meta hacia el premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. 15 Así que, todos los que hemos alcanzado la madurez pensemos de este modo; y si piensan otra cosa, también eso nos lo revelará Dios. 16 En todo caso, sigamos fieles a lo que hemos logrado. 17 Hermanos, sean imitadores de mí y presten atención a los que así se conducen, según el ejemplo que tienen en nosotros. 18 Porque muchos andan por ahí, de quienes les hablaba muchas veces, y ahora hasta lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo. 19 El fin de ellos será la perdición, su dios es su estómago, su gloria se halla en su vergüenza, y piensan solamente en lo terrenal. Filipenses 3
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Efraín Ocampo es consejero bíblico, escritor, ex periodista y fundó junto con su esposa Paola Rojo la organización sin fines de lucro Restaura Ministerios para ayudar a toda persona a reconciliarse con Dios y con su prójimo. Ha escrito tres libros sobre Restauración: 40 días en el desierto, Amar como a mí mismo y La Iglesia Útil.