Respuestas a inquietudes en Consejería Bíblica (Parte 2)
Los jóvenes preguntan... (más…)
Cuando la Escritura dice que seamos un “sacrificio vivo”, ¿a qué se refiere?
¿Cómo debían presentarse los sacrificios en el templo? ¿Qué tiene que ver eso con nuestra vida en Cristo ahora? Es necesario entender que Cristo no vino a abolir la ley y los profetas, vino a cumplirlos. Él es el propósito de la ley de Dios y las cosas en el mundo físico siempre tienen en la Escritura una enseñanza espiritual. Todo lo que pasaba en el templo sigue vigente, solamente cambió de lugar, entonces examinemos lo que significa “ser un sacrificio vivo”.
Empecemos por aclarar lo que no es, ser un sacrificio vivo:
Entonces, ¿Qué significa ser un sacrificio vivo?
Romanos 12:1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
1Sa 15:22-23 Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros. Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él también te ha desechado para que no seas rey.
Sal 40:8 El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, Y tu ley está en medio de mi corazón.
Dios no estaba sediento de sangre, la imagen pagana del dios que se deleita en el sacrificio de animales o hasta de humanos y bebés es una blasfemia. Nuestro Dios jamás deseó el sacrificio, estos fueron añadidos a la ley por causa de nuestra transgresión (Gal 3:19) a las instrucciones de Dios, por nuestro pecado (1 Jn 3:4). Porque es necesario que se haga justicia y por tal razón el inocente tiene que tomar el lugar del transgresor. La paga del pecado es muerte (Rom 6:23) y sin derramamiento de sangre no hay remisión (o pago justo) (Heb. 9:22).
El grave problema es que pasamos por alto, el llamado de atención del autor de la carta a los Hebreos, y la razón por la cual era necesario el sacrificio del Cordero de Dios, el Padre entregó a su propio Hijo para pagar de una vez y de manera suficiente las transgresiones de todos los hombres. Pero el no arrepentirse, el seguir viviendo en la carne y practicando el pecado es igual a pisotear la sangre del Hijo de Dios, y entonces ya no hay más sacrificio al cuál apelar.
Heb 10:28-31 El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente. ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo. ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!
Dios tiene planes buenos, agradables y perfectos para sus hijos. El quiere transformarnos en un pueblo con una mente renovada, quiere que disfrutemos de una vida abundante para honrarle y al escoger obedecerle, estamos escogiendo la vida:
Deu 11:26-28 He aquí yo pongo hoy delante de vosotros la bendición y la maldición: la bendición, si oyereis los mandamientos de Jehová vuestro Dios, que yo os prescribo hoy, y la maldición, si no oyereis los mandamientos de Jehová vuestro Dios, y os apartareis del camino que yo os ordeno hoy, para ir en pos de dioses ajenos que no habéis conocido.
1Jn 2:4-26 El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.
Te animo a que leas las tres cartas del apóstol Juan, después de hacerlo, examínate. ¿Eres de él o no? Muy probablemente tendrás que tomar una seria decisión, porque no es posible ser cristiano a medias.
Por último Romanos 12:1, dice que somos sacrificio vivo, y añade “santo”, eso significa apartado para un uso honroso, de la misma manera como el cordero, no debía tener defecto o manchas, tú has sido apartado, ya no eres común (Hc 10-11), así que ya no vives para agradar a los demás o para ser reconocido por los demás, de hecho tu carne necesita morir en este proceso para que todo lo que hagas entonces esté de acuerdo a la voluntad de Dios y sea agradable a sus ojos, esto es lo que significa llevar tu cruz, (Mt. 16:34) un muerto no necesita ni desea nada (Rom. 6), uno que nació de nuevo vive en el Espíritu y hace las obras del Espíritu (Gal 5)
Hola lo entendi bien era lo que estaba estudiando muchas gracias
Hermosa reflexión de la palabra siga adelante soy de Venezuela. Gracias por publicar esta información